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Durante la expansión en América Central, la Congregación, siempre sensible hacia los más necesitados, se dirigió a la Isla de Cuba. En el año 1921 abrió en Bayamo un colegio que rigieron las hermanas durante muchos años. En el año 1961 por motivos socio-políticos se tuvo que abandonar la Isla de Cuba. El 9 de enero de 1993, la Congregación vuelve a hacerse presente en la Isla, gracias a la llamada del Obispo de Santa Clara. Grande fue la alegría de las ex-alumnas cuando vieron volver a su tierra a las hermanas Capuchinas de la Madre del Divino Pastor que tanto querían. Con gran coraje, las hermanas iniciaron su misión colaborando en el apostolado parroquial, catequesis, visitas a familias, grupos de niños y jóvenes, visitas a enfermos, etc. Una tarea muy diversa y enriquecedora, desde el punto de vista de la evangelización, entre los más necesitados. |
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