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Las Hermanas Capuchinas de la Madre del Divino Pastor iniciaron su misión en el “País de la eterna primavera” el 30 de enero de 1989, estableciéndose en una barriada suburbial de la capital guatemalteca, Zona 21. Tuvieron como punto de partida la colaboración con el IGER (Instituto Guatemalteco de Educación Radiofónica), destinado a extender la educación a las áreas rurales del país en las que los adultos nunca habían tenido acceso a la enseñanza; paralelamente, desarrollaron una estrecha colaboración con la pastoral parroquial. En 1999 se estableció la Comunidad en Santa Catarina Pinula, llevando la dirección del colegio Parroquial “Francisco Peláez”, que atiende a los alumnos desde Parvulario a Bachillerato elemental. Actualmente, la Comunidad atiende los dos centros, colabora estrechamente en las actividades parroquiales y periódicamente organiza catequesis en las zonas rurales, en la que colaboran activamente los jóvenes voluntarios capuchinos de la Madre del Divino Pastor. |
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